En la presentación de un inventario, el puerto de Concepción del Uruguay fue señalado como el primero en relevar la emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y estimar la huella de carbono que está dejando su actividad sobre la costa del río Uruguay.
El informe fue elaborado por la consultora Coralia Environment y financiado por el Consejo Federal de Inversiones (CFI), en el marco de una serie de inventarios sobre el impacto de la actividad portuaria en el ambiente, encargados con el objetivo de sumar proyectos que permitan reducir variables que generan factores de riesgo.
El presidente del Ente Puerto local, Marcelo Gay Balmáz, indicó que, previamente a la recepción de este informe, ya estaban llevando acciones en este sentido: “Nosotros hemos puesto en marcha un plan de arbolado en diferentes sectores del predio portuario, como así también se está haciendo un recambio completo sobre los sistemas de iluminación en todas las zonas operativas y administrativas, colocando equipos de LED, de bajo consumo y alta durabilidad, pero lo realmente importante es estudiar a fondo, por medio de especialistas, cuál es nuestra situación real en la actualidad y cuál es el camino más eficiente que debemos seguir para ser un puerto sustentable ambientalmente”.
La presentación estuvo a cargo de Juan Casavelos por la Consultora Corelia E, y de Fernando Ureta del Departamento Técnico del CFI.
“Toda actividad humana tiene su impacto sobre el ambiente. Este es un momento de enorme importancia para el puerto porque marca el comienzo de un proceso necesario y virtuoso: el mundo avanza hacia la sustentabilidad ambiental en todos los sentidos y la actividad portuaria es vital para el crecimiento de las comunidades. A partir de aquí comienza un camino que demandará planes de trabajo y actividades para mitigar y compensar los valores de afectación que surgen a partir de la actividad portuaria”, afirmó Casavelos.
Cómo se elaboró el inventario
El informe presentado por la consultora Corelia E detalló las fuentes de emisión de GEI generadas por la actividad portuaria, entre las que se cuentan consumos de electricidad, combustibles y gas natural. De igual manera, se realizó un relevamiento sobre la gestión de residuos.
El estudio se realizó dentro de los límites del área operativa del puerto, incluyendo los permisionarios con actividades de servicios e industrias dentro del predio. En tanto, el inventario sobre la información proporcionada por el ente portuario, los operadores y empresas vinculadas a la actividad.
Por su parte, se relevaron las emisiones producidas por actividades y los procesos bajo control del ente, las generadas por terceros para la producción de energía eléctrica que consume el ente o que éste provee, como así también las que no pertenecen o no son su responsabilidad directa.
Recomendaciones
Sectorizados según el tipo de actividad, la consultora Corelia E remarcó una serie de recomendaciones para “mitigar” y “compensar” el impacto de los servicios portuarios y náuticos y su contribución al cambio climático.
En este sentido, se destacó que se apunta a una mejora de la eficiencia energética y/o uso combustibles alternativos, uso de equipos eléctricos en las terminales, recambio de tecnologías en las grúas portuarias por equipos eléctricos, suministro de energía verde en de áreas específicas de las terminales portuarias, fuentes estacionarias, recambio en la tecnología de iluminación por tecnología LED en toda la jurisdicción portuaria, optimización de sistemas de climatización en edificios propios del ente y de permisionarios, promoción e impulso progresivo de uso de PV en grandes superficies y naves propias y permisionarios.
También se recomendaron una serie de mejoras en alumbrado público, patios y muelles con equipos más eficientes en reemplazo de halógenas y la activación de luminarias crepuscular para permisionarios.
Respecto de la gestión integral de residuos, se recomendó la implementación de un plan de reducción, separación y reuso.