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Salto al Vacio Por Juan Martín Garay (*)

El hartazgo se hace sentir con más fuerzas ante una crisis cíclica que no parece tener fin.
Vemos como miles de argentinos tienen mucha tristeza por un país mayormente sin rumbo
ni esperanza. Pero más que nada lo hacen con demasiada bronca contenida, la que se deja
expresar en cada oportunidad que tienen (o han tenido) en las urnas, máxime en el último
tiempo.

Desencantados y defraudados, sumidos en una sensación de fracaso colectivo, dado que
los “últimos castigos” por parte de la ciudadanía aún no dieron sus frutos como se esperaba
luego del no acompañamiento electoral al oficialismo en el 2015, al oficialismo en 2019, al
oficialismo en 2021 y en las PASO de este año, los votantes sin lugar a dudas siguen sin
poder encontrar una salida al gran problema que aqueja a todo el entramado social, con una
crisis que no termina de resolverse pero que se deja ver cada vez más.

Ingobernabilidad y el caos
Así las cosas, un influencer economista, invento mediático de un espectro de la consultoría
económica nacional y los medios de comunicación, se presenta como el emergente visible
de ese hartazgo para una sociedad más proclive que nunca a hacer un salto al vacío por el
sólo hecho de no tener confianza en las ya consolidadas opciones tradicionales.

El periodista, politólogo y escritor especializado en la realidad política latinoamericana, José
Natanson analiza que el más votado en las PASO a nivel nacional se auto construye “como
el candidato de la antipolítica apelando a la gesta contra la casta, un concepto importado de
al que le saca todo el jugo posible”. Por eso para Natanson, “subestimar la catástrofe que
implicaría la llegada al poder de un sector que sólo representa encarnizadamente al
autoritarismo en su máxima expresión, sería no entender mejor la naturaleza exacta del
mismo”. Según él, con el posible arribo al gobierno de este espacio, todo lo institucional se
podría convertir en una “brutal degradación de la vida cívica, el desmantelamiento de los
mecanismos estatales de solidaridad y la creación de una zona liberada a nivel nacional
para los ataques al pluralismo y la diversidad. La previsible resistencia de una sociedad
movilizada como la argentina llevaría al país a la ingobernabilidad y al caos”.

Pero cuidado, equivocar el análisis puede llevarnos a no interpretar lo que nos están
queriendo decir los votantes, porque si se actúa desde un fanatismo tonto que todo lo
justifica, reivindicando cuestiones carentes del siempre necesario consenso social, generará
mayor distancia de aquello que la gente está reclamando y que parte crítica de la sociedad

observa con mucha atención. Fundamentalmente a determinados privilegios que ciertas
elites progresistas encarnadas por algunos pseudodirigentes no pueden justificar, máxime
aquellos que en los últimos días son la vergüenza de quienes siempre aspiramos a que otra
realidad sea posible, pero en función del pueblo y su bienestar general, no en términos de
estricto beneficio personal. Esos pseudodirigentes son traidores a la causa del pueblo,
merecen lo peor y que caiga sobre ellos todo el peso de la Ley.

Lo que viene por delante
La lucha por cambiar la realidad es una constante de la que no hay que claudicar, por más
desesperanza que haya. Cuando las personas luchan por ideales, sirviendo a la comunidad
con una entrega solidaria, ennoblecen con ello su accionar respecto de la defensa que se da
en el combate de ideas por transformar la realidad para beneficio del conjunto. Por ello hay
que reconocer que existe también una nueva generación de gente comprometida que busca
hacerse cargo de lo que viene por delante. Con total honestidad espiritual, sanas
intenciones, humildad intelectual y buenas ideas.

Ser militantes del amor y de la vida, comprometidos con el prójimo, implica tener exposición
en todo momento y lugar. Significa decir presente en la justificación espiritual de esa
existencia que da sentido pleno a la vida, anteponiendo los intereses del conjunto por sobre
las ambiciones personales. Buscando superar con ello a la maldita mezquindad del
utilitarismo material al que nos vemos supeditado diariamente por el contexto que suele
imponerse de manera regular, debemos luchar por una causa noble no sea otra que la causa
del pueblo.

No olvidemos que los actores principales son única y primordialmente la gente. El
comportamiento de la ciudadanía que decide, se expresa cuando vota con toda la impronta
de su bronca o esperanza. Actualmente la sociedad expresa un enorme malestar que se
explica de alguna manera con la distancia hacia cierta dirigencia política o viceversa. La
resultante de una conjugación entre la realidad y el humor social, pero mucho más por la
influencia de la situación económica, por lo que hay un alto comportamiento emocional y
emotivo en cada voto.

La mejor “herramienta” de transformación social positiva sigue siendo la política, guste o no
en tiempos que perduran sostenidamente desde el “desencanto”. La política debe estar
puesta al servicio de un verdadero interés común, el del pueblo y su felicidad, no como ha
sucedido a menudo desde ciertas expresiones recientes que no han hecho más que
decepcionar. Hay una ética relación entre fines y medios que debe tener como única medida

de las cosas exclusivamente a las personas. Si no se hace de esta manera la perspectiva
social queda solapada lisa y llanamente por la del mercantilismo político.

Entendamos a la política como “un combate de ideas, sin violencia”; rechazando con plena
convicción el individualismo y el colectivismo por ser ambos opuestos a la realización
equilibrada del sistema social. La política es ante todo una estrategia humanista,
destacando por sobre todas las cosas el ideal del bien común y la necesidad de construir
una sociedad guiada por la justicia y la igualdad. Si bien hoy parece que existe una mayoría
más proclive que nunca a realizar un salto al vacío el 22 de octubre en las urnas, estamos a
tiempo de que eso no ocurra. Reflexionemos juntos, siempre hay una mejor opción al
momento de elegir.

(*) Secretario de Gobierno de la Municipalidad de Concepción del Uruguay desde el 2019. Presidente de
Bloque Concejales del PJ 2017-2019. Presidente Comisión Hacienda y Presupuesto 2015-2019. Decano
del Colegio Mayor Universitario de Santa Fe 2003-2004.-